Familia realiza funeral a cadáver equivocado tras error en entrega de la morgue

Un grave error en la entrega de cadáveres se realizó en una morgue de Maturín, en Venezuela, donde se entregó un cuerpo que no correspondía a una familia, estos en medio del dolor no se percataron de lo sucedido y realizaron funerales al occiso.

«A Jesús lo lloró la gente que no era», decía conmovida la tía de Jesús Salazar, un joven asesinado a puñaladas y cuyo cuerpo fue entregado a la familia de Rafael Díaz, otro joven que falleció atropellado, según consignó el diario local El Pitazo.

Los familiares de Rafael aseguran que al momento de retirar el cuerpo varias circunstancias influyeron en la confusión, pues no había un registro interno sobre las características de cada fallecido y faltaba iluminación en el área donde están las cavas con los cuerpos. En ese contexto, un técnico forense habría obligado a un primo de Rafael a llevarse ese cadáver sin que estuviese seguro de que se trataba de su pariente, pues aseguraba que era el único cuerpo que había en la morgue.

«Rafael murió arrollado por un camión en Orocual. Tenía contusiones en todo el cuerpo, especialmente en el rostro. Cuando mi primo fue a reconocer el cadáver para que pudiéramos sacarlo, un trabajador lo llevó hasta el cuerpo de un hombre que tenía la cara golpeada y que mi primo terminó creyendo que era Rafael, porque el trabajador no dejaba de insistir en que en la morgue solo estaba ese muerto», dijo Ramiro Contreras, familiar del occiso al citado medio.

La familia llevó el cuerpo a su casa donde realizaron los funerales, no fue hasta un día después, que un allegado detalló el cuerpo y se dio cuenta de que en la sala de su casa tenían a otro difunto.

La grave confusión fue confirmada al llegar a la morgue, donde se encontraba la familia de Jesús, reclamando por la desaparición del cuerpo, esto luego que hubiesen intentando entregarles el cadáver de Rafael.

«El trabajador me estaba mostrando a un hombre que tenía pelo en el pecho y mi hermano no lo tenía. Mi hermano se perfilaba las cejas y este no, además, él tenía un tatuaje en la mano derecha con su nombre y esta persona no lo tenía. Así supe que no era mi hermano», detalló la hermana de Jesús.

La explicación de que era “el único muerto en el sitio”, también fue dada a esta familia, pero ellos insistían en que ese no era su familiar.

Ambas familias acordaron proceder legalmente, en tanto, en la morgue solo les dijeron era que la culpa de ellos, por no saber reconocer los cuerpos.