Expertos proponen medidas para paliar alza en los precios del gas y parafina

La guerra que actualmente se vive entre los países de Rusia y Ucrania ha generado que materias primas como el petróleo, gas y parafina aumenten su precio significativamente. En Chile por ejemplo, la mayor parte del gas es importado vía marítima, ya que, la producción local solo satisface un 25% de la demanda interna. Bajo esa línea, Luis Gonzales de Clapes UC, comentó a La Segunda que esta dependencia nos deja "expuestos a los precios internacionales, a los costos de transporte, el tipo de cambio y los márgenes de refinación”.

Si en 2020 el balón de gas licuado de 15 kilos costaba $19.558, hoy bordea los $26 mil, lo que representa un alza del 36%, cifra preocupante cuando el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) indica que este gasto corresponde a un 19% del gasto total en servicios básicos en un hogar. Además, de acuerdo con un estudio del Ministerio de Energía de 2018, 84% de las familias usan gas licuado de petróleo (GLP) para cocinar alimentos, un 78% lo utiliza para calentar agua y un 21% lo usa como método de calefacción, otro 20% en tanto ocupa parafina.

Si bien en el país existe el Mecanismo de Estabilización de Precios del Combustible (Mepco), que amortigua un poco el aumento de los costos, este solo ayuda al sector transportista, no al uso domiciliario, que será quien se vea más afectado en los próximos meses de invierno donde más se usa este tipo de combustibles para la calefacción. 

Estrategias para paliar las alzas

Por esa razón, es que varios expertos creen que el actual gobierno del presidente Gabriel Boric, en especial su ministro de Energía, Claudio Huepe, debería estudiar un mecanismo similar al Mepco, pero para el gas licuado (GLP) y la parafina.

Al respecto, desde el Observatorio del Contexto Económico UDP, el economista Juan Ortiz, indicó a La Segunda que “el mejor mecanismo sería un Fondo Estabilizador de Precios, donde la Comisión Nacional de Energía (CNE) genere una banda de precios mínimos y máximos o que, en el corto plazo, se apliquen transferencias similares al IFE, aunque reconoce que esto puede generar un costo fiscal importante".

Gonzales de Clapes en tanto, manifestó al medio antes citado que debiese existir “una transferencia directa para los hogares vulnerables”, pero insiste en que el mecanismo debe ser diseñado de manera que "no fomente aún más el consumo de combustibles fósiles por razones ambientales y de cambio climático”.

Cabe señalar que actualmente la Fiscalía Nacional Económica, el Congreso y el ministro de Energía saliente ya están trabajando en esta materia y hoy se discute un proyecto de ley en el Congreso que busca sacar a los grandes proveedores de gas del negocio minorista, pero no se están analizando las propuestas antes mencionadas.