Informe revela importantes diferencias en número de fiscalizaciones y multas entre las principales industrias

En un reciente informe emitido por la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), se destaca que la industria de la salmonicultura es la más fiscalizada en Chile,  y que es la que presenta el mejor índice de cumplimiento en comparación con otras industrias productivas.

Desde 2021, el número de fiscalizaciones a los centros de engorda de salmones ha experimentado un incremento exponencial, debido a la incorporación de más tecnología y recursos humanos dedicados a estas tareas.

El informe señala que, desde 2013, los centros de engorda de salmones han sido la unidad más fiscalizada, superando ampliamente a sectores como la agroindustria, la energía, la forestal y la minería. No obstante ello, a pesar de ser el foco de un riguroso escrutinio, los datos revelan que solo el 3,3% de los 4.833 expedientes de fiscalización a la industria salmonera abiertos desde 2013 resultaron en sanciones. Esta cifra es considerablemente baja en comparación con las otras categorías de industrias fiscalizadas: agroindustria (49,4%), energía (26,7%), forestal (23,5%) y minería (26,1%).

La paradoja de ser la industria más fiscalizada pero con mayor índice de cumplimiento plantea la necesidad de evaluar el foco de las fiscalizaciones y la efectividad de su desarrollo, ello considerando la capacidad que ha mostrado la industria para cumplir con las normativas ambientales. Es clave contar con un sistema de fiscalización eficiente y eficaz, que conduzca a que la operación se enfoque en mejorar la productividad, siempre resguardando el cumpliendo la normativa. Es una de las políticas públicas que debe revisarse y actualizarse a fin de que la industria supere un estancamiento que ha empeorado su capacidad de competir en los mercados internacionales. Ello ocurre mientras países como Noruega mejoran su competitividad y se ponen como objetivo quintuplicar la producción a finales de esta década.