Proyecto busca permitir que mascotas acompañen a pacientes terminales y graves

El senador Karim Bianchi ha presentado un proyecto de ley dirigido a quienes comparten su vida con una mascota y entienden el papel crucial que estas tienen en el núcleo familiar. Este proyecto busca permitir que los animales formen parte del proceso médico de un paciente.

La propuesta presentada ante el Congreso plantea la posibilidad de que las mascotas puedan acompañar a sus humanos en casos de enfermedades terminales, permitiendo su presencia física en el recinto médico donde se encuentren hospitalizados.

Con la finalidad de argumentar el proyecto, el senador Bianchi declaró que "sabemos que el vínculo entre el humano y un animal tiene un impacto directo en las necesidades físicas y psíquicas de niños y adultos".

Considerando esto, expuso que "creemos necesario que quienes padecen de una enfermedad terminal, puedan acceder al cariño de su mascota".

"Las mascotas también pueden disminuir el estrés, mejorar la salud del corazón e incluso, ayudar a los niños con sus habilidades emocionales y sociales, porque son embajadores de un amor sano y una lealtad incondicional", complementó el legislador.

Por lo tanto, se ha planteado la necesidad de garantizar que las personas internadas en hospitales puedan mantener esta conexión fundamentada en el amor con sus mascotas.

"Lo anterior está comprobado por múltiples publicaciones científicas que evidencian los beneficios para los pacientes que reciben Terapia Asistida por Animales (TAA), práctica que es desarrollada desde hace muchos años en diferentes instituciones de salud a nivel mundial", puntualizó Bianchi.

En caso de que el proyecto sea aprobado por el Congreso, el senador señaló que su implementación se llevará a cabo mediante la revisión de los reglamentos internos de los hospitales. En virtud de esto, se buscará permitir que las personas con enfermedades graves o terminales puedan estar acompañadas por su mascota o algún familiar cercano, como padres, madres, hijos o cónyuges.

Sin embargo, se establece como condición que el animal pueda ser recibido siempre y cuando no represente un riesgo para la salud del paciente.