El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Talca condenó a C.C.U.R.  a la pena efectiva de 10 años y un día de presidio, en calidad de autora del delito consumado de homicidio, perpetrado contra su exconviviente en en julio del año pasado, en la comuna de Río Claro.

Tras las investigaciones, se estableció que el 29 de julio de 2020, C.C.U.R. había compartido en su domicilio con la víctima C.A.C.C. “consumiendo bebidas alcohólicas, manteniendo conflictos que generaron que el afectado en horas de la noche, saliera del domicilio a la vía pública”.

Ante ello, fue seguido por la imputada en el vehículo marca Chevrolet modelo Corsa, “permaneciendo detenida en la berma costado sur de la ruta K-235 de la comuna de Río Claro en dirección al oriente y en los momentos que la víctima estaba en la berma del mismo costado, aproximadamente a la altura del km. 3, la condenada reinició a toda velocidad la marcha del vehículo, acelerando bruscamente, dirigiéndolo en dirección al oriente, atropellando intencionalmente con el tercio izquierdo de la parte frontal de la estructura del móvil a la víctima, continuando su desplazamiento en la misma dirección, accediendo a la calzada, llevando a la víctima sobre el capó del móvil, impulsándolo y quedando finalmente tendido en la calzada”.

La imputada se retiró del lugar sin prestar ayuda al lesionado y sin dar cuenta del hecho a la autoridad policial más cercana, dejando el vehículo estacionado a unos metros. “Producto del atropello la víctima  resultó con lesiones poli traumáticas en las regiones craneanas, torácicas y cervical, que le causaron la muerte en el lugar”.

En fallo unánime se aplicó, además, las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure la condena; más el pago de las costas del proceso.