Este fin de semana en la esquina de las calles Urmeneta con Illapel, se llevó a cabo una riña entre dos cuidadores de autos. Resultado de aquello, fue que uno de ellos, Andrew Ulloa Ralín de 23 años, terminó falleciendo producto de una herida cortopunzante.
El fiscal Álvaro Espinoza, informó que a partir del trabajo realizado por la Brigada de Homicidios, en donde se tomaron declaraciones a testigos presenciales, se dio cuenta que todo se dio en “una dinámica de una discusión previa, una riña que se ocasiona en el sector, existencia de un arma cortopunzante, con la cual se produce la herida a la víctima; hay un testigo que señala que ve esta dinámica, que agrede el imputado a la víctima”.
Cabe señalar que, en un principio se decía que el agresor se había entregado a Carabineros, no obstante, se dirigió hasta donde ellos para acusar que él había sido la víctima de una lesión que tenía en su oreja izquierda. El imputado además contaba con antecedentes por porte de arma blanca, de lesiones, lesiones menos graves y graves y otras infracciones a otros articulados del código penal.
Su abogado, Camilo Jiménez, aseguró que el actuar de su defendido fue en legítima defensa. Dijo que uno de los testigos expresó que “Es la víctima la que extrae desde sus vestimentas el cuchillo y que en este intercambio de golpes habría terminado lesionada ella misma (…) él intenta agredirlo con el cuchillo y mi representado se trata de defender de esta agresión, y termina mi representado con un corte en el lóbulo izquierdo”, concluyó.
Fuente: SoyPuertoMontt.
