El Ministerio de Vivienda y Urbanismo en la región del Maule, advirtió a las familias sobre un caso de engaño y falsos mensajes para estafar a familias, haciéndose pasar por un funcionario del Serviu. 

El engaño corresponde al uso del nombre de un funcionario de la institución que se encargaría de la tramitación de subsidios habitacionales para la vivienda, y para ello, los estafadores piden a cambio de la transferencia de importantes sumas de dinero.

La situación fue advertida por el propio afectado quien a través de la plataforma Facebook y mediante un mensaje de Messenger se enteró de la existencia de una persona que está usando su nombre y estaría lucrando en forma ilícita a través de engaños y mentiras a familias, que reclaman hoy la devolución de sus dineros, ya que ciertamente no existe gestiones al respecto. 

“Quiero expresar mi solidaridad con el funcionario afectado quien tiene una impecable trayectoria de 27 años en nuestro servicio, donde ha dado muestras de rectitud, probidad, compromiso y disciplina”, dijo el director (s) de Serviu Claudio Daneck. 

Agregó, que nadie puede cobrar por gestiones destinadas a la obtención de una vivienda o un subsidio, ya sea dirigentes de comités, Entidades de Gestión Inmobiliaria y social o cualquier particular que se atribuya facultades para gestionar postulaciones.

“Todos los trámites son gratuitos y el único ente facultado para manejar recursos son los bancos o entidades financieras, donde se gestiona la apertura de cuentas de ahorro”, indicó la autoridad. 

El Secretario Regional Ministerial de Vivienda Gonzalo Montero, en tanto, reiteró que es una falta grave y que puede llegar a instancias judiciales solicitar dinero en nombre del Ministerio. “Nosotros no queremos que se repitan experiencias negativas en la región y que lamentablemente han terminado en estafas, donde las únicas perjudicadas son las familias”, dijo. 

Siempre es recomendable, ante cualquier duda, informarse en el Serviu a través de las numerosas plataformas digitales que están dispuestas debido a la situación de pandemia, que sugiere que no haya atención presencial y ser especialmente cuidadosos de eventuales cobros o pagos asociados a la gestión de proyectos habitacionales.